Músculos de la pelvis

Los músculos de la pelvis incluyen todos aquellos relacionados con el suelo pélvico, encargados de funciones determinadas tanto en hombre como mujeres. Podemos dividir los músculos de la pelvis según su ubicación en 4 grupos:

• Pared anterior: aquí encontramos el músculo iliopsoas formado por dos músculos: psoas mayor e ilíaco. Su principal función es ser flexor de la cadera. 
• Pared lateral: aquí se encuentra el músculo glúteo medio y glúteo menor que en conjunto dan soporte cuando estamos parados en una de las piernas. También se encuentra el obturador interno que realiza la rotación externa, aducción y abducción de la cadera. 
• Pared posterolateral: aquí se encuentra el músculo glúteo mayor que es uno de los más grandes del cuerpo y los músculos piramidales o piriformes. Éstos últimos deben su nombre a que tienen forma de pera. Participan en la abducción, extensión y rotación externa de la cadera. Una hipertrofia del músculo piramidal puede crear un atrapamiento del nervio ciático dando lugar al síndrome del piriforme. 
• Músculos del suelo pélvico o diafragma pélvico: éstos son el grupo de músculos más destacables. En este post sobretodo me centraré en este grupo de músculos ya que creo que para las mujeres es muy importante saber cuáles son, qué funciones realizan y cómo cuidarlos para que funcionen adecuadamente. Estos músculos cumplen las tareas de tensar y relajar el suelo pélvico. La tensión garantiza la continencia (evita el escape de heces y orina). 

Podemos clasificar los músculos del suelo pélvico en los siguientes grupos:

Elevador del ano: está formado por los músculos ileococcígeo, pubococcígeo y puborectal. El músculo elevador del ano constituye el músculo principal del piso o suelo pélvico, sostienen los órganos pélvicos y participan en la continencia anal y el control de la micción.

Diafragma urogenital: este diafragma rodea la salida de la uretra y vagina tal como indica su nombre. Está formado por los músculos isquiocavernoso, bulbocavernoso, transverso profundo del periné (el periné es la porción que queda ubicada entre el ano y la vagina en la mujer y entre el ano y el escroto en los hombres), transverso superficial del periné y el esfínter de la uretra. Estos músculos intervienen en la micción, eyaculación y erección. En el momento del parto vaginal, al realizar una episiotomía se ha de tener cuidado de no dañar el músculo bulboesponjoso y/o el transverso superficial del periné.

Esfínter del ano: constrictor del ano y controla la expulsión de materia fecal del cuerpo.

Coccígeo: forma sostén para los órganos intrapélvicos.

Como podéis ver, en la pelvis existe un gran número de músculos, que nos ayudan a realizar muchas de las funciones fisiológicas del cuerpo humano. Es importante tomar consciencia de ello y mimarlos trabajándolos y tonificándolos para que puedan ejercer su función correctamente. En este caso, la fisioterapia del suelo pélvico así como otras alternativas como la radiofrecuencia pueden ser beneficiosas para ayudarte a mantener tonificado tu suelo pélvico.